El 6 de mayo se inauguró el XXV Congreso Ordinario de la
Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (CTEUB) en el Coliseo
Enrique Parada Aguilera de la ciudad de Camiri. Debido al persistente boicot de
profesores oficialistas, entre ellos delegados del Frente de Unidad del
Magisterio (FUM) auspiciado por el PCB, aliado del MAS, el evento no ha podido instalarse
hasta el día siguiente.
Estribillos, insultos y hasta sillas volando son las formas
de ataque de decenas de delegados pro masistas designados burocráticamente en
La Paz y trasladados en avión, con viáticos y permisos laborales otorgados por el
Ministerio de Educación, para someter al sindicalismo docente tal como acaban
de hacer con la Central Obrera Boliviana (COB), reporta Carlos Ernesto del
periódico Rebelión el 7 de mayo.
El 8 de mayo el oficialismo logra copar la Comisión de
Poderes gracias al financiamiento del gobierno que le ha permitido inflar el
Congreso con delegados adscritos. Las delegaciones progubernamentales trajeron adscritos
en la misma cantidad de sus titulares, sabiendo que en las sesiones
preparatorias votan todos.
La diferencia de delegados titulares de las dos corrientes
polarizantes es mínima; por eso el oficialismo intenta debilitar a la
delegación trotskista de La Paz y a otros distritos como el Chaco chuquisaqueño,
para de esta manera controlar el Congreso y capturar la Confederación, explica
el dirigente del POR Miguel Lora.
En las últimas horas del miércoles, la Comisión de Poderes a
la cabeza de Azcárraga, torpe y envalentonada, confirma la inclusión de 29 adscritos
truchos de la delegación paceña, desconociendo la voluntad del Congreso
Ordinario de La Paz, y veta a los opositores José Luis Álvarez, Pardo,
Copeticona y Amoragas.
La delegación paceña repudia la maniobra, se levanta y rápidamente
activa la rebelión con el respaldo de las delegaciones de Cochabamba, Oruro,
Potosí, Chuquisaca, Uncía, Chaco chuquisaqueño, Yacuiba, Villazón, Tupiza y las
minorías anti oficialistas de otros distritos del país. El duro enfrentamiento
desatado obliga a los miembros de la Comisión de Poderes y de la Dirección oficialista
a abandonar el recinto con la intención de continuar la sesión preparatoria en
la Federación de Maestros Urbanos, pero la masa enfurecida impide nuevamente que
se instale la reunión.
Al finalizar la jornada, los insurrectos marchan victoriosos
hasta la plaza principal de Camiri y allí se encuentran con un grupo de vecinos
en vigilia contra el alcalde masista. En los discursos se enfatiza que la
lucha de los maestros por la independencia sindical es parte de la lucha
que están librando otros sectores contra el gobierno, los chuquisaqueños y los
cruceños, los indígenas, el pueblo de Camiri, los transportistas de Cochabamba,
la clase media movilizada en defensa del voto, el pueblo todo asqueado por el
obsceno despilfarro, indignado por el impune latrocinio.
