(ML-MASAS).- El XIX Congreso Ordinario de la Central Obrera Departamental de Cochabamba se ha realizado en un momento en que la clase obrera del Valle se encuentra en un estado de distensión, inmediatamente después de las fiestas de fin de año y la percepción del doble aguinaldo, momentáneamente ha logrado evadir la conciencia de los trabajadores de la realidad que adquiere perspectivas sombrías como consecuencia de los efectos de la crisis económica internacional que ha empezado a golpear sobre el país.
Como consecuencia de la caída de los precios de los minerales y los hidrocarburos en el mercado mundial, el fantasma de la desocupación ya se asoma desde algunos municipios y centros mineros privados porque están empezando a despedir una buena parte de sus dependientes. Es nuevo ejército de desocupados se verán obligados a llenar las calles generando una sobre oferta de la fuerza de trabajo y provocando una caída en los sueldos y salarios. Por otra parte, muchas empresas industriales han anunciado que están al borde de la quiebra como consecuencia del contrabando masivo que ingresa desde el Brasil, la Argentina y la invasión de la ropa usado a los mercados locales. El incremento de la desocupación, los miserables sueldos y la caída vertiginosa de los ingresos de los sectores independientes, en los siguientes meses del 2016, se encargarán de obligar a los explotados y oprimidos del país a pisar la realidad y los empujarán a recurrir nuevamente a la acción directa para exigir al gobierno impostor soluciones a sus problemas vitales.
La burocracia se ha esmerado en montar cuidadosamente el Congreso para cerrar el paso a la tendencia revolucionaria que se ha hecho presente a través de dos sectores influyentes de la clase media, el magisterio urbano y la Federación Universitaria de la UMSS. Ya el hecho de llegar al Congreso a través de la clase media es una desventaja y la otra desventaja es que las bases del movimiento obrero, por su no incorporación a la movilización, permite a los dirigentes tener las manos libres para maniobrar.
Toda la camarilla oficialista se ha concentrado en la comisión política con la finalidad de rechazar el documento presentado por la fracción trotskista; pero tuvieron la debilidad de no presentar uno suyo que plantee con claridad el apoyo abierto al gobierno del MAS. La comisión ha resuelto tomar como base tres documentos, el presentado por la fracción revolucionaria, otro presentado por un elemento del PT y el documento aprobado en el anterior Congreso de la COD hace tres años. Sin embargo, estos tres documentos hacen duras críticas al gobierno del MAS, aspecto que los oficialistas pretende evitar por todos los medios. La comisión hace un colaje de todos ellos y no puede disimular el carácter anti oficialista del nuevo documento con un párrafo donde se dice que el “proceso de cambio no es exclusivamente del MAS sino de todo el pueblo boliviano”.
¿Por qué los agentes del gobierno no se atreven a mostrarse como lo que realmente son en el documento, teniendo el control total de la Comisión? Hay una sola explicación: temen chocar con los representantes de los diferentes sectores que, indudablemente, vienen poderosamente influenciados por el malestar reinante en sus bases. En las otras comisiones es abierto el repudio al hecho de que burócratas hubieran convertido como trampolín sus cargos sindicales para trepar al parlamento, a los concejos de las gobernaciones y los municipios y otros cargos del gobierno central. En todas las comisiones se exige la necesidad de que los sindicatos deben retornar a ejercer la independencia sindical y política con referencia a la patronal y el Estado. En estas comisiones (social, económica, cultural) son las ideas trotskistas que animan sus resoluciones centrales.
Las resoluciones más importantes aprobadas por consenso en el Congreso:
1.- En la Comisión Económica se señala que se debe impedir la trampa de seguir calculando los incrementos de sueldos y salarios en base al índice de precios al consumidor (índice de inflación manipulada por el INE). Los nuevos dirigentes de la COB deben organizar la lucha por el incrementos de sueldos y salarios de acuerdo a la canasta familiar (sueldo mínimo vital) y que estos deben reajustarse automáticamente en la misma proporción que suben los precios de los artículos de primera necesidad (escala móvil de sueldos y salarios).
2.- En la Comisión Social, después de un análisis de la situación lamentable de los jubilados, se dice que la clase obrera debe volver a lucha por una renta que cubra todas las necesidades del trabajador, por ahora, por lo menos, imponer una renta equivalente al 100 % de los sueldos de los trabajadores activos.
En el problema de la Caja Nacional de Salud, se plantea que el gobierno tiene la obligación de garantizar el servicio universal y gratuito de salud para todos los bolivianos pero sin tocar los recursos financieros, la infraestructura y el equipamiento de la CNS. Para poner en vigencia del servicio de salud universal, el estado debe financiar todo su costo. Construyendo nuevos hospitales, equipándolo y creando los correspondientes ítems para médicos, enfermeras y el personal administrativo.
3.- En la Comisión Cultural aprueban íntegramente el documento presentado por el magisterio urbano que rechaza la Ley 070 por ser anticientífica y retrógrada.
Tomado de Masas, Miguel Lora O.
La burocracia se ha esmerado en montar cuidadosamente el Congreso para cerrar el paso a la tendencia revolucionaria que se ha hecho presente a través de dos sectores influyentes de la clase media, el magisterio urbano y la Federación Universitaria de la UMSS. Ya el hecho de llegar al Congreso a través de la clase media es una desventaja y la otra desventaja es que las bases del movimiento obrero, por su no incorporación a la movilización, permite a los dirigentes tener las manos libres para maniobrar.
Toda la camarilla oficialista se ha concentrado en la comisión política con la finalidad de rechazar el documento presentado por la fracción trotskista; pero tuvieron la debilidad de no presentar uno suyo que plantee con claridad el apoyo abierto al gobierno del MAS. La comisión ha resuelto tomar como base tres documentos, el presentado por la fracción revolucionaria, otro presentado por un elemento del PT y el documento aprobado en el anterior Congreso de la COD hace tres años. Sin embargo, estos tres documentos hacen duras críticas al gobierno del MAS, aspecto que los oficialistas pretende evitar por todos los medios. La comisión hace un colaje de todos ellos y no puede disimular el carácter anti oficialista del nuevo documento con un párrafo donde se dice que el “proceso de cambio no es exclusivamente del MAS sino de todo el pueblo boliviano”.
¿Por qué los agentes del gobierno no se atreven a mostrarse como lo que realmente son en el documento, teniendo el control total de la Comisión? Hay una sola explicación: temen chocar con los representantes de los diferentes sectores que, indudablemente, vienen poderosamente influenciados por el malestar reinante en sus bases. En las otras comisiones es abierto el repudio al hecho de que burócratas hubieran convertido como trampolín sus cargos sindicales para trepar al parlamento, a los concejos de las gobernaciones y los municipios y otros cargos del gobierno central. En todas las comisiones se exige la necesidad de que los sindicatos deben retornar a ejercer la independencia sindical y política con referencia a la patronal y el Estado. En estas comisiones (social, económica, cultural) son las ideas trotskistas que animan sus resoluciones centrales.
Las resoluciones más importantes aprobadas por consenso en el Congreso:
1.- En la Comisión Económica se señala que se debe impedir la trampa de seguir calculando los incrementos de sueldos y salarios en base al índice de precios al consumidor (índice de inflación manipulada por el INE). Los nuevos dirigentes de la COB deben organizar la lucha por el incrementos de sueldos y salarios de acuerdo a la canasta familiar (sueldo mínimo vital) y que estos deben reajustarse automáticamente en la misma proporción que suben los precios de los artículos de primera necesidad (escala móvil de sueldos y salarios).
2.- En la Comisión Social, después de un análisis de la situación lamentable de los jubilados, se dice que la clase obrera debe volver a lucha por una renta que cubra todas las necesidades del trabajador, por ahora, por lo menos, imponer una renta equivalente al 100 % de los sueldos de los trabajadores activos.
En el problema de la Caja Nacional de Salud, se plantea que el gobierno tiene la obligación de garantizar el servicio universal y gratuito de salud para todos los bolivianos pero sin tocar los recursos financieros, la infraestructura y el equipamiento de la CNS. Para poner en vigencia del servicio de salud universal, el estado debe financiar todo su costo. Construyendo nuevos hospitales, equipándolo y creando los correspondientes ítems para médicos, enfermeras y el personal administrativo.
3.- En la Comisión Cultural aprueban íntegramente el documento presentado por el magisterio urbano que rechaza la Ley 070 por ser anticientífica y retrógrada.
Tomado de Masas, Miguel Lora O.
